Inquietudes

¡¡Hola chic@s!!

No sé si estáis al tanto de la iniciativa de Olga del Blog Luna Lunera respecto a la ayuda entre blogueros. A creado un Club Cadena de Favores. Espero que os leáis bien la información y os animéis a participar. Cosas como están, es la que hace a la gente grande.

Otra cosilla, Libromaníaca del Blog La Estantería del Olvido ha creado un nuevo concurso. AQUÍ tenéis las bases. Hace un mes creó un concurso que tuvo que ser cancelado por la poca participación. ¡Ayudémosla!

Gracias a la iniciativa de Olga y a las palabras que me ha transmitido Libromaníaca he decidido escribir este relato que lo presentaré para dicho concurso.
¡Espero que os guste! Creo que tod@s nos sentiremos identificados.

¡¡ Un beso y Hasta Pronto !!

Inquietudes

Desde bien pequeñita me he sentido diferente. Siempre me ha gustado leer, y mis vacaciones las pasaba rodeada de libros que me hicieran soñar. Había momentos en los que prefería leer a salir a la plaza con los amiguitos del barrio. Iba muy adelantada en mi curso, destacaba por mis notas y las matemáticas eran mi pasión. Soñaba con ser profesora.

A medida que pasaban los años, empecé a descubrir otra gran pasión, ,la escritura. Empecé a plasmar mis más profundos deseos y miedos en papel. No sabía expresarme en mejor forma que con palabras. Llenaba cuadernos enteros de párrafos con tachones y poesías inacabadas. Mi habitación era similar a una biblioteca. Las estanterías llenas de libros y mi escritorio de folios garabateados.

Un día decidí buscar la opinión de mis cercanos. Algunos alababan mis escritos, otros los ignoraban y otros me hundían. Sentía que nadie creía en mi y que los que me alababan, me lo decían por cumplir. Tenía que buscar una solución.

Se me ocurrió usar la red para plasmar mis escritos. ¿Qué mejor que el mundo virtual para encontrar alguien al que le interese tu trabajo? En Internet está todo el mundo, ¿no? Había bastantes oportunidades.

Con miedo e ilusión creé un Blog. No sabía ni que nombre ponerle. Las ansias por crear una primera entrada y conseguir un primer seguidor, me invadía. Quería mantenerlo en secreto. No quería buscar lectores cercanos, quería que el mundo virtual me diera a conocer por si solo. Solo quería un pequeño espacio en un mundo tan inmenso.

Los días pasaban y mi ilusión pasaba a la vez con los días. Nunca había seguidores nuevos y mis entradas nunca recibían ningún comentario. Empecé a rogar a mi familia, a mis amigos y conocidos que echarán un vistazo y aunque algunos se hicieron seguidores, eran como pequeños fantasmas dentro de mi Blog.

Pensé en crear un primer concurso, y tal como lo organicé, tuve que cancelarlo. Nadie quiso formar parte de mi iniciativa. Aún no tenía contacto con editoriales y mis premios no eran los “mejores” que circulaban por la red. Era consciente de que había miles de concursos mejores que el mio, ¿pero tanto cuesta hacer un pequeño favor a un Blog que acaba de empezar? Ya llegarán los grandes concursos, pero paso por paso, no se construye una casa empezando por el tejado. ¿Por qué los usuarios no lo entendían? ¿Por qué no darme una oportunidad? Yo intentaba participar en cada concurso que veía, ¿por qué nadie lo hacia por mi?

Pensé en abandonar, en dejar de publicar. De hecho, durante unos meses, mis entradas eran escasas. Mis sueños desvanecían y dejaba de creer en mi misma.

Una mañana, me desperté con fuerzas y puse todas mis intenciones en hacerme un hueco. Busque y busque blogs que tenían mis mismas inquietudes e intente ponerme en contacto con algunos de ellos. Les pedí ayuda y para mi sorpresa, la tuve. Muchos contestaron a mis dudas, otros se ofrecieron a ayudarme y muchos se hicieron seguidores de mi Blog. Lo más duro, empezaba a cobrar luz. Mi Blog comenzaba a tener vida propia.

Ahora me tocaba a mi. Tenía que ser constante si quería que todo continuará y debía demostrar todo lo que era capaz a los seguidores que estaban confiando en mi. Les debía todo. Gracias a ello, mi sueño de que mis palabras fuesen leídas, se estaba cumpliendo. Tenía que agradecerlo de algún modo.

Escribía, comentaba, me interesaba por sus blogs... Todo tenía que ser mutuo y con ello, los números crecían. Cada día tenía más y más seguidores y mis entradas, se llenaban de comentarios.

¿Era ya un Blog grande? ¿Tenía que sentirme ya importante en el mundo virtual? No. La continuidad, la constancia y el trabajo es lo que hace que un Blog mantenga su nivel. Nunca puedes darte por confiada y siempre habrá algo nuevo que aprender.

Me prometí a mi misma seguir siempre un lema: Lucha por tus sueños a pesar de las adversidades, pronto todo recompensa con frutos.

A día de hoy y con algún año más, mi sueño sigue siendo el mismo y mis ganas por ser leída y recompensada siguen estando ahí.