Un Capricho Del Destino - Wendy

Aquí os dejo el relato que nos ha enviado Wendy. Se aprecia una mejoría desde el relato anterior a este. ¡ Se nota que le ha echado ganas ! . Espero que os guste.

Os recuerdo que tod@s debéis participar en este concurso. Os dejo AQUÍ las bases del concurso nuevamente.

Sin más, os dejo disfrutar con el relato de Wendy...

Mil besos y ¡ Hasta Pronto !

Un Capricho Del Destino

Me desperté por quinta vez aquella noche. No podía dormir. Mi cerebro sólo podía pensar en lo que había sucedido aquella tarde, y no me dejaba desconectar ni un segundo para descansar. Tenía todas las hormonas alteradas, mi cuerpo todavía experimentaba una resaca de emociones y no podía dejar de suspirar y sonreír como una tonta.

Había experimentado mi primera vez con el chico de mis sueños, ¿quien podría dormir después de eso? Nos encontrábamos sentados en el sofá comiendo palomitas mientras veíamos una película aburridísima, cuando noté que se me acercaba más de lo normal y me hacía apoyar la cabeza en su hombro. Estaba tan cerca, que no me hacía falta concentrarme mucho para escuchar los fuertes latidos de su corazón junto con su respiración agitada. Noté como se encendían mis mejillas y mi respiración igualaba la suya. Cuando no pude más, me giré para mirarle a la cara. Él estaba observándome con un brillo especial en los ojos y fue acercándose lentamente, hasta fundir nuestros labios en un beso suave y cálido, y luego otro y otro…

Miré el reloj y salté corriendo de la cama. Si no me daba prisa llegaría tarde al instituto, y él estaría esperándome. Me puse lo primero que vi en el armario, cogí la mochila y salí disparada hacia el instituto. Cuando llegué le busqué por todas partes él pero no estaba en ningún sitio. Sabía que tenía clase a primera hora en la clase de al lado, pero no aparecía. Acabé por rendirme y entrar en clase sin tener la oportunidad de saludarle y quizá darle un beso de buenos días.

Pasó la mañana y él seguía sin aparecer. Cuando le llamaba al móvil, me salía como apagado o fuera de cobertura. Me extrañó, pero no quise darle mucha importancia, seguro que tenía el móvil sin batería y se había quedado dormido.

Fue al volver hacia casa al mediodía cuando vi todos los coches de policía y la ambulancia rodeando mi edificio. Había mucha gente alrededor y no se veía nada, pero poco a poco me fui acercando hasta llegar a la puerta. Estaba intentando escuchar a alguien a ver si sabían lo que había sucedido, cuando me fijé en que en el centro de todo el círculo formado por la gente y la policía, había una moto roja que me resultaba muy familiar hecha pedazos. Era su moto. El alma se me cayó a los pies. Salí corriendo hacia la ambulancia como una histérica preguntando por él, preguntando el porque su moto estaba destrozada y no le veía por ninguna parte.

Todo había ocurrido aquella mañana, mientras yo salía corriendo para no llegar tarde, él me estaba esperando sentado en su moto. Yo no le vi y él a mí tampoco. Se puso nervioso porque no salía de casa y decidió ir solo al instituto, se montó en la moto corriendo sin volver a ponerse el casco ni mirar siquiera si venía algún coche. Lo único que notó fue el impacto de un coche chocándose a toda velocidad contra su moto, y él salió disparado. Murió en el acto. Yo me desmayé. Cuando desperté, estaba tumbada en mi cama, pero aquella no era yo, me sentía vacía, una parte de mi había muerto con él. Y nunca la volvería a recuperar.